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Disputas en los grupos
    Summery

    Existe la posibilidad de que los miembros se comporten mal y de que el grupo no sepa cómo afrontar las desavenencias. Este tipo de cosas ocurren siempre y son bastante normales. En tal caso, los facilitadores o un mediador específico deben dirigirse al miembro en cuestión y hablarán de lo que ha ocurrido y de cómo puede evitarse para el futuro. La herramienta que se utilice para resolverlo depende de cada grupo; lo importante es trabajar los problemas en lugar de dejarlos de lado y que finalmente sean irreparables.

    Si hay quejas frecuentes y no se puede resolver mediante una conversación cara a cara, en algún momento el grupo tendrá que decidir cómo manejar la situación. No se trata de "acabar" con nadie, sino de permitir que se trabaje el tema y que todos encuentren una solución. El moderador no es el líder en este proceso, sino simplemente un facilitador que se asegura de que las cosas funcionen bien. Llamamos a este procedimiento "voto de desconfianza" porque en algún momento se llega al hecho de que uno o más miembros ya no son de confianza. El alcance de la "reunión" lo determinan los propios grupos. Por ejemplo, el grupo puede desvincularse de los miembros individuales y la cooperación puede no ser posible. Mientras el miembro no actúe en contra de la comunidad Helfa, puede ser expulsado del grupo, pero puede seguir formando parte de la comunidad Helfa acudiendo a otro grupo. Si perjudica a la comunidad, tiene que ser apartada de todo el proyecto. Esto NO significa que esta persona ya no pueda vivir la idea Helfa - sólo significa que por el momento, debido a la falta de alternativas, ya no es sostenible. Si la "actitud" cambia, es posible que la persona vuelva en algún momento. Porque creemos firmemente que los seres humanos debemos permanecer juntos para crear la paz. Y esto no puede hacerse separando a unas personas de otras. Sin embargo, esto no puede hacerse siempre y en todo momento. Por eso, como está escrito, a veces es indispensable una primera separación.

    Lo que no funciona en absoluto es que las personas, los miembros, sean simplemente expulsados de un grupo sin previo aviso ni motivo. Esto va en contra de cada uno de los 10 principios. Por lo tanto, trabajemos juntos para aprender una nueva forma de estar con los demás y aplicarla.